El Chi Kung es un sistema de ejercicios mediante los que se cultiva y se moviliza el cuerpo energético. Con la práctica continuada de estos ejercicios se podrá mejorar la circulación, desbloquear articulaciones, corregir las posturas, aliviar los dolores y calmar tensiones, tanto físicas como mentales.

 

El Tai Chi es originariamente un arte marcial, que se basa en los conocimientos milenarios de la fisiología y de la circulación de la energía y de la sangre. Trabajaremos por un lado ese aspecto de "arte" y, por otro, su potente efecto terapéutico. Con el Tai Chi se aprenderá a manifestar artísticamente el cultivo trabajado en el Chi Kung, mediante el aprendizaje de la Forma: una serie de movimientos coreografiados que pueden ser de gran belleza una vez que se domina la técnica. Estos movimientos son armónicos, suaves, lentos, circulares y respetuosos con el cuerpo.

 

 A nivel mental, nos proporcionará un estado muy gratificante de relajación y de presencia, corrigiendo con el tiempo los malos hábitos mentales que podamos tener. A nivel físico, la práctica de la forma aumenta la movilidad de las articulaciones, así como la elasticidad de los músculos y la fuerza de las piernas, ayuda a relajar la parte superior del cuerpo, espalda, hombros, cuello; corrige las posturas, y reestructura el sistema miofascial que constituye, digamos, la matriz de nuestro cuerpo.

 

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